Autoconsumo con paneles o placas solares para producir tu propia energía
El autoconsumo solar es una práctica cada vez más popular que permite generar energía de manera autónoma y aprovechar la luz solar para un ahorro económico y energético significativo.
Las placas solares para autoconsumo son una opción eficiente y rentable, especialmente en comparación con otras formas de autoabastecimiento, como la energía eólica.
Hoy en día, el autoconsumo solar se puede implementar en una amplia variedad de superficies, desde tejados de viviendas y edificios comerciales hasta terrenos abiertos y huertos. Esta flexibilidad hace que sea una solución viable para distintos tipos de consumidores.
Aunque comúnmente se asocia el autoconsumo solar con la generación de electricidad, también puede aplicarse en sistemas térmicos o híbridos. La clave está en la instalación de módulos solares capaces de satisfacer las necesidades energéticas específicas del usuario.
Autoconsumo fotovoltaico: tipos y usos
El autoconsumo fotovoltaico es una opción popular para el autoabastecimiento energético, que implica aprovechar la luz solar para generar electricidad mediante placas solares. Esta forma de producción eléctrica, totalmente renovable, permite a los usuarios utilizar la energía generada para cubrir sus propias necesidades.
Existen distintos tipos de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico, dependiendo de cómo se aproveche la energía generada. Desde sistemas destinados al consumo exclusivo del hogar hasta instalaciones conectadas a la red eléctrica que permiten vender el exceso de energía generada.
El Real Decreto-ley 244/2019 establece las condiciones para el autoconsumo fotovoltaico en España, definiendo dos tipos principales de autoabastecimiento energético:
Autoconsumo sin conexión a la red eléctrica: También conocido como autoconsumo aislado, este sistema permite a hogares y empresas utilizar la energía eléctrica generada por placas solares para satisfacer sus necesidades energéticas sin depender de la red eléctrica convencional.
Autoconsumo sin conexión a la red eléctrica: También conocido como autoconsumo aislado, este sistema permite a hogares y empresas utilizar la energía eléctrica generada por placas solares para satisfacer sus necesidades energéticas sin depender de la red eléctrica convencional.
Estas modalidades brindan a los usuarios la oportunidad de aprovechar al máximo la energía solar y reducir sus facturas de luz, especialmente a través de la compensación de excedentes, lo que les permite obtener beneficios adicionales.
¿Cómo funciona una instalación fotovoltaica con autoconsumo con conexión a la red eléctrica?
Una instalación fotovoltaica con autoconsumo y conexión a la red eléctrica funciona de la siguiente manera:
Captación de energía solar: Los paneles solares captan la luz solar y la convierten en energía eléctrica de corriente continua (CC).
Inversión de corriente: La corriente continua generada por los paneles solares se convierte en corriente alterna (CA) mediante un inversor fotovoltaico. Esta es la forma de electricidad utilizada en la mayoría de los hogares y empresas.
Autoconsumo: La electricidad generada se utiliza para alimentar los dispositivos eléctricos del hogar o negocio. Si la demanda eléctrica es menor que la energía generada por los paneles solares, el exceso de electricidad puede ser vertido a la red eléctrica.
Vertido a la red eléctrica: Cuando la instalación genera más electricidad de la necesaria para el autoconsumo, el excedente se vierte a la red eléctrica convencional. Este excedente puede ser vendido a la compañía eléctrica o compensado en la factura eléctrica del propietario a través de un sistema de compensación de excedentes, dependiendo de la normativa local y las políticas de la compañía eléctrica.
Consumo de electricidad de la red (opcional): En caso de que la demanda eléctrica sea mayor que la energía generada por los paneles solares, se consume electricidad de la red eléctrica convencional.
En resumen, una instalación fotovoltaica con autoconsumo y conexión a la red eléctrica permite aprovechar la energía solar para reducir la dependencia de la red eléctrica convencional, al tiempo que ofrece la posibilidad de vender el excedente de electricidad generada a la compañía eléctrica o compensarla en la factura eléctrica. Esto puede resultar en ahorros significativos y contribuir a la sostenibilidad ambiental.
¿Cómo funciona una instalación fotovoltaica con autoconsumo sin conexión a la red eléctrica?
Una instalación fotovoltaica con autoconsumo sin conexión a la red eléctrica y 100% aislada, también conocida como sistema de autoconsumo fotovoltaico off-grid, funciona de manera independiente a la red eléctrica convencional. Aquí te explico cómo funciona:
Captación de energía solar: Los paneles solares captan la luz solar y la convierten en energía eléctrica de corriente continua (CC).
Almacenamiento de energía: La energía generada por los paneles solares se almacena en baterías solares, que son sistemas de almacenamiento de energía diseñados para retener la electricidad generada durante el día para su uso durante la noche o en momentos de baja radiación solar.
Inversión de corriente (opcional): En algunos casos, dependiendo de los dispositivos eléctricos que se utilicen, la corriente continua (CC) almacenada en las baterías puede necesitar ser convertida en corriente alterna (CA) mediante un inversor.
Autoconsumo: La electricidad almacenada en las baterías se utiliza para alimentar los dispositivos eléctricos del hogar o negocio cuando no hay suficiente energía solar disponible.
Generación adicional de energía (opcional): En algunas instalaciones, se pueden integrar generadores diésel o sistemas de energía eólica o hidroeléctrica para proporcionar energía adicional cuando la producción solar no es suficiente para cubrir la demanda.
Gestión del consumo: Es importante gestionar el consumo eléctrico de manera eficiente para optimizar el uso de la energía almacenada en las baterías y asegurar un suministro continuo de electricidad.
En resumen, una instalación fotovoltaica con autoconsumo sin conexión a la red eléctrica permite aprovechar la energía solar para alimentar completamente un sistema eléctrico independiente de la red eléctrica convencional.
¿Autoconsumo colectivo o individual?
El autoconsumo se puede disfrutar de dos maneras: de forma individual y de forma compartida, conocida como autoconsumo colectivo. El primero se refiere a una instalación de placas solares que genera energía para una sola propiedad, mientras que el segundo proporciona energía a varias propiedades, compartiendo la energía generada por los paneles.
En el autoconsumo individual, la energía generada es consumida por una propiedad específica, como una vivienda unifamiliar, mientras que en el autoconsumo colectivo, la energía se comparte entre diferentes propiedades, como en una comunidad de vecinos.
Aunque el proceso de instalación del autoconsumo individual suele ser más rápido y no requiere un permiso especial de la comercializadora, el autoconsumo colectivo puede ser más complejo y requiere un permiso especial. Sin embargo, ambos tipos de autoconsumo pueden beneficiarse de ayudas públicas, aunque el coste de instalación del autoconsumo colectivo tiende a ser más alto y el proceso de instalación puede ser más largo.
5 ventajas del autoconsumo fotovoltaico
El autoconsumo fotovoltaico ofrece numerosos beneficios tanto económicos como ambientales. Aquí están las cinco ventajas más significativas:
El autoconsumo es ahorro: La principal ventaja del autoconsumo solar es el ahorro económico que ofrece. Instalar placas solares puede reducir hasta un 70% o más el costo de la electricidad, incluso se podría llegar al 100%. Este ahorro energético es inmediato y se puede observar al día siguiente de la instalación a través de la pantalla de monitorización.
El autoconsumo es una inversión duradera: El autoconsumo solar es una inversión a largo plazo y altamente duradera. Las instalaciones pueden permanecer operativas durante décadas, con una vida útil estimada entre 25 y 30 años. A medida que transcurre el tiempo, la inversión inicial se amortiza gradualmente, convirtiendo al autoconsumo con placas solares en una solución energética rentable.
El autoconsumo tiene muchas ayudas y subvenciones: El autoconsumo solar con placas solares recibe un sólido respaldo público en forma de diversas ayudas y subvenciones. Cada año, se actualizan y aumentan las convocatorias de estos programas. Además, instalar placas solares puede conllevar beneficios fiscales, los cuales pueden ser solicitados a la Agencia Tributaria durante la campaña de la renta. Es importante destacar que el fomento del autoconsumo está alineado con los objetivos de la Unión Europea, especialmente en lo que respecta al acceso a una energía sostenible.
El autoconsumo tiene un gran futuro: El futuro de la energía solar para autoconsumo en España es prometedor debido a las abundantes horas de sol y las condiciones favorables del país. Según la Agencia Internacional de Energía (IAE), la energía solar ya cubre el 19.1% de la demanda energética nacional. Estas perspectivas positivas han dado lugar al surgimiento de nuevas empresas instaladoras que ofrecen placas solares a precios más accesibles. A pesar de los avances logrados en los últimos años, el Estado considera que el autoconsumo «apenas ha despegado». Por esta razón, se están implementando varios planes nacionales para impulsar y fomentar el autoconsumo hasta el año 2030.
El autoconsumo es respetuoso con el medioambiente: El autoconsumo es una opción energética respetuosa con el medioambiente y una de las principales fuentes de energía renovable. El uso de paneles solares no emite gases de efecto invernadero, contribuyendo así a la reducción del calentamiento global y disminuyendo la dependencia de combustibles fósiles. El empleo de placas solares es fundamental en la lucha contra el cambio climático y, en los últimos años, ha surgido como una de las alternativas energéticas más sostenibles y accesibles.
